Vacuidad

Cuando pensamos en vacuidad, nos imaginamos un espacio vacío en el que no hay nada, que nada existe. Pero es realmente posible que en algun lugar no exista nada?

En varias filosofías orientales, está arraigado el concepto de Vacuidad al cual lo llaman en sánscrito "Śūnyatā".

Śūnyatā significa: lo sin entidad, lo insustancial, lo que no es, la vaciedad, la vacuidad. De acuerdo a este concepto, no hay nada que posea una esencia individual y no hay una realidad independiente para cada cosa, todo lo que existe está relacionado y es interdependiente, y las individualidades son ilusiones de nuestra percepción.

El concepto de śūnyatā no implica que la realidad no exista, no equivale a una ausencia total, o sinónimo de Nihilismo, sino que todas las cosas son totalmente relativas.

Para la filosofía Budista la realidad se encuentra en la Senda del Medio entre nihilismo y materialismo, y toda la enseñanza sobre la naturaleza de la realidad se desarrolla para comprender qué es esa vacuidad.

Cuando se logra percibir esa vacuidad, a través de las prácticas de meditación y demás, se llega a lo que llaman el "despertar o iluminación".

El buda en el "Sūtra Mahāyāna Mahāparinirvāna" dice: "El sabio percibe la vacuidad y la no vacuidad, lo eterno y lo impermanente, el sufrimiento y la dicha, el yo y el no yo... porque percibir la vacuidad de todas las cosas y no percibir la no-vacuidad no puede calificarse de Vía del Medio; el percibir el no-yo de todo sin percibir el yo no puede considerarse la vía del medio."

Por otro lado, de acuerdo a la física, específicamente en la Teoría cuántica de Campos, el vacío cuántico es el estado cuántico con la menor energía posible (Energía del punto cero).

En ese "vacío", aparecen y desaparecen pares de partículas llamadas Virtuales. Una partícula virtual es en general una partícula elemental que existe durante un tiempo tan corto que debido al "relación de indeterminación de Heisenberg" no es posible ser observada directamente. De todas maneras, ese "vacío fluctuante" interactua con las pertículas que si se pueden observar por que permanecen más tiempo, y se deduce entonces su existencia.

En otras palabras, lo que se entiende actualmente por vacío, no es un espacio de vacío absoluto, sino que en realidad, contiene ondas electromagnéticas fluctuantes y partículas virtuales que saltan dentro y fuera de la existencia.

Entonces, este vacío cuántico es visto como un campo, y sus fluctuaciones, se manifiestan en forma de ondas, las cuales dan lugar a las diferentes partículas elementales.

La Teoría de Cuerdas va más allá, y supone que lo que está provocando esas ondas-partículas son en realidad vibraciones de una especie de filamento o cuerda de energía unidimensional pero que se menifiesta en más de 4 dimensiones. Si ese filamento oscila de cierta manera, entonces veríamos un electrón; si oscila de otra manera, veríamos un fotón, o cualquier otra particula. "...Esta teoría, ampliada con otras como la de las Supercuerdas o la Teoría M pretenden alejarse de la concepción del punto-partícula..." (Wikipedia).

La Teoría M, habla de branas, membranas (2 branas), formadas por Cuerdas (1 brana), que se ven como Ondas-Partículas fluctuantes de un campo. Esta teoría identifica la existencia de 11 dimensiones, pero nosotros aparentemente sólo percibimos 4, ese es nuestro Espacio-tiempo.

En ese Espacio-Tiempo, se manifiesta toda nuestra existencia multidimensional, allí esta todo lo que observamos diercta o indirectamente, ya sea físico o no, si existe de alguna manera, entonces se encuentra allí manifestado.

Como todo es relativo al observador, el vacío es un concepto también relativo a la escala que manejamos. No se escapa a la dualidad, de forma tal que existe siempre frente la aucencia de un "algo".

“Treinta rayos convergen en el cubo de una rueda, pero es de su vacío que depende la utilidad del carro. Modelando la arcilla se hacen vasijas, pero es de su vacío que depende la utilidad de la vasija. Se horadan puertas y ventanas para hacer una habitación, pero es de su vacío que depende la utilidad de la habitación. En consecuencia, así como nos beneficiamos con lo que es, debemos reconocer la utilidad de lo que no es.”

(Tao Te King, XI. Lao Tsé.- s. III a.C)